Querida Celia:
¿Cuantos sueños se nos han ido y han quedado en nada? Ya ves, yo siempre soñé con poder dar un día clases y tal y como está el patio, conocidos y amigos me lo pintan tan negro que parece que casi hay que dar gracias por no hacerlo y sin embargo no deja de producirme un cierto sentimiento de derrota... He conseguido muchas cosas, más de las que creí nunca que llegaría a conseguir. Siempre he sido de creer que hay que cumplir casi todos tus sueños dejando al menos uno para que siga siendo el motor que te empuje a intentar conseguirlo, sin embargo tal y como están las cosas de feas uno a veces cede a sentirse derrotado.
A veces eres de un gracioso que es que me parto... gracias por el regalito. Vale que tengo mala memoria, pero de ahí a regalarme una libreta para que haga listas... Sí, ya sé que tengo que comprar suavizante y detergente. ¿Puedo usar tu libreta para escribir también tus notas?
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2 comentarios:
No, espero que Celia sea un poco más optimista y, con historias como la de la libretita y demás, te haga reír para que puedas abandonar ese sentimiento de derrota.
No es bueno, ni creo que tampoco sano; dices muy bien que siempre hay que tener algo ahí, para seguir luchando por ello. Pues eso.
Bicos meigos
clases doy yo , y gracias a eso sobrevivimos, las doy en casa asi que... ánimo, que niños para clases particulares te aseguro que aún quedan, no pagadas como a ntes pero....
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